Tuxpan está dejando de ser una cueva de lobos, por lo menos en lo que a iluminación se refiere, la gestión del alcalde José Manuel Pozos Castro ante la Secretaria de Energía, la veracruzana Rocío Nahle, ha permitido que esta ciudad y puerto esté saliendo de la penumbra en las que en las últimas administraciones municipales la tenían.
Se han instalado ya 4 mil nuevas lámparas y van otras miles más ya contratadas con una mayor capacidad luminaria, lo que permite claridad en la vía pública, lo que representa mayor seguridad para los propios tuxpeños y también para los visitantes, partiendo de que este municipio es un importante centro turístico del país.
La potencia de iluminación de estas nuevas lámparas también contribuyen a mayor seguridad pública porque permitirá que las cámaras de vigilancia que también se están instalando en esta localidad puedan cumplir mejor su función, inhibiendo la delincuencia y facilitando las investigaciones delictivas.
Después de que el tema del alumbrado público fuera solo botín de corsarios de las pasadas administraciones, el gobierno municipal actual ha cambiado la historia y Tuxpan será una de las ciudades mejor iluminadas en el estado de Veracruz.
Decenas de historias de corrupción por los financiamientos del alumbrado público en Tuxpan en el pasado, hay ya en la leyenda urbana, la ciudad vivía en tinieblas prácticamente, robos, violaciones y asesinatos se ejecutaron al amparo de esta oscuridad permitida por la corrupción gubernamental, nadie podía sentirse seguro en un pueblo sin luz y por lo mismo sin seguridad pública.
En el renglón turístico una ciudad iluminada invita a propios y extraños a recorrerla a cualquier hora del día o la noche, el sector turismo también ha sido beneficiado con estas nuevas luminarias.
Al alcalde de Tuxpan, José Manuel Pozos Castro, de amplia trayectoria en el servicio público, ahora se le ha elegido como presidente de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, en este orden. se podrá seguir haciendo mucho por este municipio, para que quede en el pasado esa imagen de cueva de lobos, de fieras, de delincuencia y potencializando el desarrollo humano y la cultura avancemos un grado como civilización en esta localidad.
Falta mucho por hacerse para lograr este objetivo, pero nadie puede dejar de reconocer de que iluminar a la ciudad, es un gran paso en esa dirección.
Editorial
