El artista malagueño reedita su trabajo ‘Prometo’ antes de su final de gira en el Palau Sant Jordi, la tercera vez que llenará el recinto en un mismo año
Las buenas y las malas noticias del disco ‘Tráiler’ de Aitana
Por: Albert Doménech/La vanguardia
Pablo Alborán completará este 2018 tres conciertos en el Palau Sant Jordi y ya tiene fecha para una nueva cita el próximo año y para la que las entradas están volando. Un dato más que significativo que ayuda a hacerse una idea del buen momento profesional que está viviendo el cantante malagueño, uno de los artistas españoles más laureados y con más reputación internacional. El intérprete presenta este viernes la reedición de su disco Prometo, trabajo con el que ha logrado el quíntuple disco de platino, y que presentará en 2019 en una gira por Latinoamérica. Alborán elogia la libertad creativa, apuesta por la honestidad en su trabajo y advierte de que el exceso de pasión puede llegar a ser peligroso. Después de la tormenta que sigue azotando su vida profesional, el artista no descarta tamizar de nuevo su vida con un periodo de hibernación.
Prometo es ya quíntuple disco de platino en un momento en el que la venta de álbumes ha bajado. Es usted un héroe…
¡Es una pasada! Reconozco que solo estoy pendiente de las cifras de ventas la primera semana, luego me centro en otras cosas de mi trabajo. Cuando me dieron la sorpresa en El Hormiguero no me lo esperaba, no lo sabía y me hizo mucha ilusión. Mi agradecimiento es porque la gente sigue apostando y, gracias a ello, puedo seguir haciendo discos, peleando y ofreciendo cosas distintas.
También está de enhorabuena por la reedición del disco que se ha publicado este viernes con documental incluido. ¿Nos sorprenderá el Pablo más cercano?
El documental muestra todo lo que hay detrás de cada show y de mi música. Creo que verán a un Pablo emocionado y un trabajo de equipo donde se transmite el buen rollo y la cercanía que a mí me gusta. Me encanta que la gente me conozca en las distancias cortas y creo que eso sumará mucho al disco.
El 21 de diciembre estará en el Palau Sant Jordi por tercera vez en 2018. Tiene que ser un santuario para usted…
¡Y haremos un cuarto en 2019 y las entradas se están vendiendo! Estoy flipando, en serio. Catalunya siempre ha sido un lugar clave, siempre he recibido un cariño enorme desde el minuto uno. ¿El Sant Jordi? Cada vez que voy llego despreocupado porque sé que es un lugar ideal para que la gente disfrute, vaya quien vaya. Mi equipo técnico siempre que va suelta la misma frase: “Aquí, gloria”. Así que el día 21, gloria (sonríe).
Todos los días hay que hacer el ejercicio de respirar, poner las cosas en orden e intentar quitarle peso tanto a las cosas malas como a las buenas
¿Cómo ha aprendido a gestionar la presión?
No se termina de aprender. Todos los días hay que hacer el ejercicio de respirar, poner las cosas en orden e intentar quitarle peso tanto a las cosas malas como a las buenas. Si hay buenas noticias durante todo un día también hace que te olvides de otras cosas que son importantes. También es una suerte poder contar con gente de confianza que te ayuda o, porque no, que nos podamos mandar al carajo mutuamente (Ríe).
En 2015 decidió parar después de años frenéticos. ¿Qué le aportó dar ese paso valiente?
Calma y poder ordenar mi vida. Pude reencontrarme con la ilusión y la razón del por qué estoy aquí, que es hacer música, y disfrutar de cada paso que daba. No se me había olvidado, pero es cierto que había momentos en los que todo se desvirtuaba o se descontextualizaba.
¿Hay algo que no volvería a hacer ahora?
Aprendí a decir que no y también aprendí a decir que sí. Ese paron nos enseñó a ser más honestos con nosotros mismos, a no bajar la guardia, pero a la vez tampoco querer controlarlo todo. Eso es algo clave cuando tu trabajo también es tu pasión. ¡Las pasiones son peligrosas!
Es usted un artista versátil, aunque sorprendió su faceta más latina con el éxito La llave. ¿Es un posible camino a seguir para seguir descubriéndose?
Lo hice de esa manera porque me apetecía divertirme. Después de dar a conocer temas más personales me apetecía probar cosas nuevas, y más con un grupo colombiano como Piso 21 con los que me llevo muy bien. Las cosas que propongo a mi equipo son por gusto y para hacerlas con placer y ganas de divertirme. Lo que sí que intento hacer es no repetirme; me da un poco de medio ese estigma que se le pone a todo…
Y más con géneros como el reguetón…
Hace poco me preguntaban, “¿qué hay que hacer con el reguetón para corregirlo?” No hay que corregir nada del género, sí las letras denigrantes de cualquier estilo musical, no solo del reguetón.
Aprendí a decir que no y también aprendí a decir que sí
Se marchó con las manos vacías en los pasados Grammy Latinos pero vivió de cerca el éxito de Rosalía. ¿El fenómeno es tan bestia como parece?
-Lo es. ¡Es que ella es una pasada! Espero que no se quede solo en un fenómeno, y creo que no será así. Rosalía será y es una artista con un recorrido enorme, nos va a seguir sorprendiendo toda su vida. Lo que ha logrado la artista es romper varios estigmas en todos nosotros. No sigue ninguna regla, hace lo que quiere y detrás de esa libertad hay un concepto y un criterio. Me parece admirable y lo que ha hecho es clave para todos los que creamos.
Otro nombre propio: Alejandro Sanz. Tiene una colaboración con él en el disco y creo que ha descubierto otra cara del artista…
Sí, su parte más personal, la que del artista que me invita a su casa para poder trabajar en una canción nueva. Alejandro ha tenido una generosidad conmigo que siempre le voy a agradecer. Es un refugio y una oportunidad tener amigos como él.
-Pablo Alborán se dio a conocer gracias a vídeos que colgaba en las redes sociales, una tendencia habitual en España. ¿Tiene un consejo para esas personas aún anónimas?
Que conserven la pasión y que siempre parta de una necesidad musical, no de tener fama o seguidores en las redes sociales. Me daría pena y miedo que lo único que buscara esa gente fuera la aceptación constante. Deben buscar la aceptación de uno mismo en lo que están haciendo, olvidándose de los demás.
¿Y una promesa que jamás les haría?
Nunca prometería el éxito.
Entiendo que entre sus planes de futuro no está parar en 2019…
No. Estaremos aún de gira en Latinoamérica y en España. Eso sí, después quizás si que me regale un tiempo de hibernación…
Rosalía será y es una artista con un recorrido enorme, nos va a seguir sorprendiendo toda su vida