Gustavo Vega dirige “2016: el año de la crisis”, documental que aborda el colapso financiero y crisis política que azotó al estado de Veracruz durante este año.
Más de dos años de producción e investigación le llevaron al director y también economista, Gustavo Vega, realizar el documental “2016: el año de la crisis”, filme que expone el desastre político y económico que azotó al estado de Veracruz a través de testimonios y una recopilación histórica que refleja la magnitud del daño a la población en uno de los periodos más oscuros en la historia del estado.
“El documental no se centra directamente en la consecuencia, más bien en un primer momento es una preocupación por explicar estructuralmente cómo llegamos a ese momento de la crisis: es un agotamiento de un modelo económico y político en Veracruz, son dos décadas, y entenderlo principalmente como una crisis de las finanzas públicas”, explicó el director en entrevista para El Economista.
Vega enfatiza que las finanzas públicas fueron el eje de esta crisis. “Muchas veces se dice que la economía es un oficio silencioso: nadie nota cuando hay proezas, pero cuando la economía está mal, se sienten las consecuencias”, señaló Vega. En Veracruz, la sociedad vivió en carne propia los efectos de esta debacle.
Bajo esta premisa, “2016: el año de la crisis” presenta cuatro aspectos clave: los jubilados y pensionados, quienes enfrentaron represión a finales de 2015; el conflicto entre la universidad pública y el gobierno estatal, que puso en duda la garantía de una educación superior accesible; la depresión en las finanzas municipales que afectó a los ayuntamientos; y el fraude que sufrieron los empresarios a manos del gobierno.
Vega reconoció que plasmar de manera objetiva y equilibrada estos complejos escenarios requirió un extenso proceso de investigación. La pluralidad de voces incluidas en el documental busca precisamente ofrecer una visión completa de lo sucedido, desde la perspectiva de académicos, afectados directos y funcionarios públicos. “El cine es un punto de encuentro de muchas opiniones”, afirmó.
Vega explicó que la historia de 2016 en Veracruz era una historia desmembrada, con piezas dispersas que necesitaban ser reunidas para entender la magnitud de la crisis. “La realidad es compleja y tiene muchos puntos de vista. Las historias, y en este caso el cine, nos ayudan a darle forma a esa realidad”, reflexionó.
Asimismo, el director subraya la importancia de que este tipo de producciones audiovisuales contribuyan a la construcción de una memoria histórica.
“Es fundamental construir esta memoria, que las sociedades tengan un registro de lo que sucedió. Hoy en día se vive tan rápido que lo que pasó hace 8 años probablemente ya se olvidó. Entonces ese es uno de los aspectos, es la génesis de este documental: dejar una memoria que permita poder conversar, analizar el tema y tener diálogo entre nosotros”, mencionó Gustavo Vega.
A lo largo de poco más de hora y media, el cineasta veracruzano presenta esta revisión histórico-social que culmina en los últimos años del sexenio del polémico exgobernador Javier Duarte. Los malos manejos del erario público y su eventual fuga al extranjero acapararon titulares en medios nacionales e internacionales. Sin embargo, poco se ha hablado de las repercusiones posteriores para los veracruzanos y de cómo las administraciones subsecuentes enfrentaron los desafíos dejados por una de las mayores crisis económicas del estado del sureste. De ahí la relevancia de este documental.
“2016: el año de la crisis”, producida por la Cineteca de Veracruz, se estrenará en Xalapa el último fin de semana de agosto, posteriormente se proyectará en universidades, y centros culturales. Además, se espera que próximamente esté disponible en plataformas digitales.
“Espero que lo reciban muy bien, que propicie conversaciones, que genere alguna discusión, que genere encuentro. El cine es un punto de encuentro y eso logra una película: detonar una discusión, detonar una conversación y llegar a una conclusión más avanzada ya hicimos algo. Espero que lo tomen como lo que es: una película, que sea entretenida y que pueda ser interesante para el público”, concluyó Gustavo Vega.