Indican que un cardenal entregó a Benedicto un documento en el que le informó que pretendían acabar con él dentro de 12 meses
El cardenal colombiano Darío Castrillón Hoyos entregó al papa Benedicto XVI un documento en el que le informó que existía un complot para acabar con él dentro de 12 meses, según publicó el viernes el diario italiano «Il Fatto Quotidiano».
El periódico señala que Castrillón entregó a la Secretaría de Estado vaticana un documento, escrito en alemán, dirigido a Benedicto XVI, en el que le informaba de lo que dijo el cardenal y arzobispo de Palermo, Paolo Romeo, durante algunas conversaciones en China el pasado noviembre.
«Vaticano, tramas y venenos. El papa morirá dentro de doce meses», tituló la información en la portada del diario, que en páginas internas publica una página del citado documento y la traducción al italiano de todo el mensaje.
En el documento se citan declaraciones «de una persona bien informada» sobre las conversaciones que se mantuvieron durante un viaje del cardenal Romeo a China el pasado noviembre.
«Seguro de sí mismo, como si lo supiese con precisión, el cardenal Romeo anunció que al Santo Padre le quedan sólo 12 meses de vida», se lee en la traducción de este documento.
Las declaraciones de Romeo fueron expuestas «como una persona probablemente informada de un serio complot delictivo, con tal seguridad y firmeza, que sus interlocutores en China pensaron asustados que se estaba preparando un atentado contra el papa», dice el rotativo citando la traducción del documento.
Durante estas conversaciones, Romeo aseguró que Benedicto XVI estaba también preparando su sucesión y que había indicado el nombre del cardenal y arzobispo de Milán, Angelo Scola.
Castrillón se enteró de estas conversaciones y decidió escribir al papa el 30 de diciembre del año pasado y Benedicto XVI recibió el mensaje algunos días después, expresa el rotativo, especializado en reportajes de carácter político.
El portavoz de la oficina de prensa del Vaticano, el jesuita Federico Lombardi, consultado por el diario, afirmó que la información estaba «tan fuera de la realidad y tan poco seria que no se podía tomar en consideración».
«Me parece increíble y no quiero ni comentar», añadió Lombardi.