El pasado mes de mayo el Gobierno del Estado y el ayuntamiento de Perote establecieron un convenio para el traslado del uso y aprovechamiento de la Fortaleza de San Carlos, mediante el cual realizarán las gestiones necesarias a fin de destinar recursos que permitan trabajos de rehabilitación, adaptación, conservación y mantenimiento del inmueble rumbo a la celebración de los 200 años del Heroico Colegio Militar.
Este miércoles, el Secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos acompañó al gobernador Cuitláhuac García Jiménez a un recorrido por esta antigua edificación militar del siglo XVIII, donde pudieron constatar los avances de las obras de rehabilitación con las que este monumento histórico recupera su esplendor y grandeza.
Cisneros Burgos así lo dio a conocer a través de su cuenta de Facebook, donde reconoció la iniciativa del mandatario estatal por conservar y recuperar este patrimonio histórico y baluarte de Veracruz.
El documento signado el 18 de mayo por el gobernador, Cuitláhuac García Jiménez, y el presidente municipal, Delfino Ortega Martínez, estipula que el proyecto quedaba sujeto a la autorización del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (INDAABIN), para ceder a la administración estatal dicho recinto a través del acuerdo correspondiente.
Con la importancia que representa la Fortaleza de San Carlos a la población, el convenio permitirá hacer uso del mismo para actividades cívicas, culturales, artísticas y educativas, además de brindar servicio a los visitantes del país y el extranjero, con el visto bueno de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
El también llamado Castillo de Perote, Castillo de San Carlos, Fuerte de San Carlos o Prisión de Perote fue construido por órdenes del virrey Joaquín de Montserrat, aunque ejecutado por su sucesor, Carlos Francisco de Croix, respondió al temor de un posible ataque inglés después de que estos invadieran La Habana en 1762.
Durante la guerra de Independencia sirvió de resguardo para los regimientos de España, posteriormente albergó al primer Colegio Militar y se mandó destruir en la década de 1850 sin éxito, para permanecer abandonada hasta la época post-revolucionaria cuando fue habilitada como cárcel estatal hasta 2008 cuando se empezó a rescatar para museo.
Editorial
