Nu México y Klar, que han llegado a ser parte de las 30 instituciones captadoras de depósitos más importantes del país, ahora pueden compararse con bancos tradicionales pequeños y medianos.
Las fintechs están en diferentes etapas de evolución en Latinoamérica, pues mientras que en Chile, Colombia y Perú los bancos tradicionales les dejan poco espacio a los nuevos participantes, México “se posiciona como el próximo centro regional de innovación” de estas organizaciones financieras, señaló Moody’s en un reporte publicado este viernes.
Las fintechs están en diferentes etapas de evolución en Latinoamérica, pues mientras que en Chile, Colombia y Perú los bancos tradicionales les dejan poco espacio a los nuevos participantes, México “se posiciona como el próximo centro regional de innovación” de estas organizaciones financieras, señaló Moody’s en un reporte publicado este viernes.
Apuntó que las fintechs sin sucursales que captan depósitos desafían los supuestos de que las sucursales físicas, y la presencia en todo el país, son necesarias para mantener un importante modelo de franquicias de depósitos en el país.
Señaló que las ofertas de depósitos de alto rendimiento de las fintechs han creado un crecimiento considerable en los últimos años, y que han aumentado gradualmente su importancia en el sector financiero de México.
Detalló que Nu México y Klar, que han llegado a ser parte de las 30 instituciones captadoras de depósitos más importantes del país, ahora pueden compararse con bancos tradicionales pequeños y medianos.
Sin embargo, la agencia refirió que la participación combinada en los depósitos del sector bancario sigue siendo bastante modesta y representa solo el 0.4%.
“Si mantienen su trayectoria de crecimiento, podrían ser parte de las 15 principales en los próximos
trimestres. Aun así, estimamos que estar a la altura de los líderes del mercado probablemente requerirá un tiempo más prolongado”, consideró en el análisis “Las fintechs ponen a prueba su ventaja competitiva al introducirse en el sector bancario”.
Expuso que las fintechs y los neobancos intensifican su competencia con bancos tradicionales por garantizar un financiamiento asequible, y que un entorno regulatorio favorable promueve la expansión de las carteras de productos, en busca de fuentes de financiamiento de menor costo en condiciones financieras restrictivas.
En respuesta, agregó, los bancos tradicionales han acelerado su transformación digital y han aumentado sus inversiones en tecnología para atender a este mercado mexicano olvidado, además de prepararse para la nueva dinámica competitiva.
Por ejemplo, Bineo, Openbank y Hey, los bancos digitales de Banorte, Banco Santander México y Banregio, respectivamente, obtuvieron sus licencias bancarias ante el regulador financiero y está previsto que empiecen a operar durante 2024.
Aseguró que independientemente de la experiencia general de los clientes, la batalla por atraerlos se reduce a las tasas de interés.
“Sin la carga de la infraestructura tradicional y los gastos generales de los bancos tradicionales, las fintechs tienen la flexibilidad de ofrecer tasas más competitivas. Por lo tanto, las fintechs están empezando a modificar la dinámica de las tasas de interés, que contrasta con los rendimientos históricamente bajos de las cuentas de ahorro tradicionales”, expresó.
Los desafíos para la sostenibilidad del negocio
La firma manifestó que los esfuerzos de las tecnológicas financieras y los llamados “neobancos” por expandir su mercado y diversificar sus actividades en América Latina presiona a la banca tradicional, pero al mismo tiempo acarrea nuevos riesgos y desafíos para la sostenibilidad de su negocio, alertó el reporte.
La transformación desde firmas fintechs hacia fuentes de financiamiento estable y de bajo costo marca ese cambio de rumbo que también implica la adhesión a marcos regulatorios más estrictos, dijo la agencia, donde nuevos riesgos podrían frenar su próxima fase en América Latina.
Límites a los mayores incentivos de costos y oportunidades y riesgos de implementación figuran como los principales desafíos de las fintechs a medida que amplían sus operaciones y adoptan normas más estrictas, detalló el reporte.
Por su parte, los bancos tradicionales también han tenido que hacer un cambio más profundo hacia los productos digitales, como lo que está ocurriendo en Brasil, donde ese giro también les permite atender segmentos de clientes desatendidos y clientes móviles.
En el gigante sudamericano las fintechs atraen a millones de clientes.
“Las fintechs necesitan ampliar de manera efectiva sus estrategias y modelos de negocio, además de reforzar el fondeo para mantener la sostenibilidad del negocio y la creciente competencia con los bancos”, dijo Moody’s en el análisis de casos en Brasil, Colombia, Chile, México y Perú.
La supervisión regulatoria que acompaña el crecimiento y diversificación presentara desafíos, pues necesitará de un equilibrio entre el ajuste de estrategias financieras y la preservación de ventajas competitivas que impulsan la expansión de las Fintech, puntualizó.
Con información de Reuters