La selección mexicana sub 17 arribó al Ángel de la Independencia de la Ciudad de México en punto de las 13:10 horas para celebrar con los aficionados la obtención de la Copa del Mundo de la especialidad.
Reportes de la Secretaría de Seguridad del Distrito Federal (SSPDF) se calcularon miles de personas en la glorieta del monumento, quienes gritaron, vitorearon, saltaron y lanzaron porras a los jóvenes héroes por su triunfo.
El combinado azteca derrotó 2-0 a Uruguay en la gran final que se disputó en el estadio Azteca ante más de 105 mil asistentes.
Con banderas de México, pelucas, playeras verdes, espuma, las famosas vendas en la cabeza en mención a Julio Gómez, sombreros y bigotes, los seguidores se dieron cita en el emblemático monumento que se ha convertido en lugar obligatorio para festejar logros deportivos.
De corbata, de zapatos o con tenis, este lunes se convirtió en un día especial y atípico para seguir el festejo de los campeones del mundo a nivel sub 17. (El Universal)