Trascendió
Milenio Diario
Que la reunión bilateral del líder cubano Raúl Castro y el presidente Enrique Peña Nieto se desarrolló en términos más que cordiales.
Quedó la promesa del mandatario mexicano de visitar pronto la isla y conocer al comandante Fidel Castro.
Sin embargo, ninguno de los dos gobiernos aprovechó el encuentro para hacer oficial la versión de que Lázaro Cárdenas será el embajador en Cuba.
Que tener a un Cárdenas en su gobierno, así sea en la embajada de La Habana, sería uno de los mayores éxitos, quizá el mayor, del nuevo gobierno en cuanto a integración de adversarios.
Lázaro y Peña Nieto tuvieron buena relación cuando ambos fueron gobernadores de los fronterizos Michoacán y el Estado de México. De ahí a que el perredista se integre al gobierno del priista habría un buen tramo.
Máxime cuando crecía la especie de que Lázaro sería un candidato de consenso al llegar la hora de reemplazar a Jesús Zambrano en la presidencia del PRD.
Que sucumbieron los últimos esfuerzos por presentar la reforma energética en el periodo de sesiones que comienza el viernes.
Las prioridades para las bancadas del PRI estarán en las iniciativas contra la corrupción y por la transparencia, así como los no pocos pendientes por terminar de legislar en materia de seguridad.
Que más vale tarde que nunca. Dos meses después, el Partido Verde se suma al Pacto por México.
Firmarán la adhesión hoy en el hotel Camino Real de Anzures, pero sin parafernalia. No asistirán los líderes de PAN y PRD, tampoco el Presidente ni los secretarios Luis Videgaray y Miguel Osorio.
El representante del gobierno será Aurelio Nuño, jefe de la Oficina de la Presidencia.
Que en donde tampoco habrá parafernalia será en la plenaria de diputados del PRD, que arranca hoy en Ixtapan de la Sal.
Nada de invitados célebres, como Cuauhtémoc Cárdenas o Miguel Ángel Mancera. De Marcelo Ebrard, al parecer ya ni quién se acuerde.
Que, hablando de Mancera, corría la versión de que varios diputados del PRD querían oficializar en la plenaria su descontento por los “guiños” del jefe de Gobierno con el PRI.
Pero, al parecer, son más los que defienden a Mancera, argumentando que si visitó a los senadores del PRI fue para darle vuelo a la reforma política del DF.
Editorial
Un comentario en «Lázaro Cárdenas, Embajador en Cuba»