Pudo haber ocurrido una gran explosión en Tuxpan
Por Ramón Rodríguez Rangel
Sin plan de emergencia en caso de siniestro, sin caminos de evacuación alternos, sin previo aviso a las comunidades rurales aledañas y colonias en su perímetro de posible afectación, el llamado «Venteo de rutina » de la interconexión del gasoducto Texas- Tuxpan de Transcanada pudo haber causado una tragedia de dimensiones mayores el pasado 25 de diciembre.
Para los vecinos de Monte Grande no fue un «Venteo de rutina » fue un accidente fuera de control de la empresa que maneja la planta industrial, lo que con cualquier cohete, fuego artificial que se hubiera lanzado ése día, a ésa hora, en ése sector pudo haber causado una explosión de grandes proporciones, la vida de miles de personas estuvo en peligro.
El ruido causado por el «Venteo o fuga de gas» comentan los ejidatarios colindantes se escuchaba a kilómetros como una turbina de avión, volando a baja altura; la alarma y la zozobra cundió entre el vecindario, que hasta horas más tarde se empezó a evacuar por personal militar y de protección civil .
El gasoducto según informa su portal TC Energía, la empresa representante el ducto tiene la capacidad de transportar diariamente 2 mil 600 millones de pies cúbicos de gas natural para el abasto en el centro del País.
La empresa asegura en su sitio web que sus operaciones son desarrolladas bajo estándares de calidad y seguridad en el servicio.
Después del incidente el Director de Protección Civil del Ayuntamiento guardó silencio y al reportero que le preguntaba algo referente al caso, respondía «pregúntenle al Presidente Municipal » quien estuvo reunido a puerta cerrada (no abierta como se había anunciado ), con los representantes de Transcanada y TC Energía en la sala de Cabildo del Municipio, pero sin Cabildo y sin la propia comisionada en Protección Civil del Ayuntamiento Beatriz Piña, el Alcalde señaló al cuestionársele que estaba en pláticas de negociación con la empresa y que posteriormente informaría los detalles .
El «venteo» viene a ser una fuga controlada, provocada al detectarse alta presión en la tubería que representaba todavía un riesgo mayor.
Según lo informó la empresa, el sistema de monitoreo del gasoducto detectó una variación en la presión de éste y activó protocolo de «venteo» resaltando que la causa de la variación de la presión está bajo investigación interna.
Antes de guardar silencio el Ayuntamiento en boletín de prensa afirmó que había ocurrido una fuga y que había con sellos clausurado la planta, dejando fuera incluso al personal de mantenimiento técnico de ella, lo que protestó TC Energía.
Estos hechos evidencian una falta de protocolo de emergencia industrial en Tuxpan del que Protección Civil Estatal y Municipal tienen que estar informados, para en caso de emergencia activar los planes de contingencia.
El propio Diputado Federal Tuxpeño Marco Antonio Medina Pérez demandó en comunicado de prensa la instalación de un plan de Protección Civil en donde participen los 3 niveles de gobierno, junto con las autoridades de las comunidades rurales y representantes de los centros de población que pudieran ser afectados en una emergencia.
Además propuso el legislador una supervisión técnica especializada Nacional e Internacional de los protocolos de seguridad industrial de las empresas que manejan combustibles, pero sin que esto sea pretexto de los gobiernos municipales para negarles permisos o documentación necesaria para su operación como medida para pedir recursos económicos que muchas veces no se transparentan y no llegan a las comunidades donde se deberían dirigir los apoyos.
Puntualizó que la responsabilidad social de cada empresa, de apoyar las comunidades donde se asientan debe ser independiente del cumplimiento con los requerimientos de seguridad necesarios, porque remarcó que la vida de las personas no puede ser moneda de cambio por obras públicas o recursos económicos que en primer lugar le corresponde desarrollar a las propias autoridades locales.
Sobre todo lo anterior para despejar dudas o sospechas las reuniones con las empresas involucradas en los protocolos de emergencia y seguridad industrial deberían ser totalmente abiertas y transparentar las aportaciones y negociaciones con las compañías, para que luego no se diga que el Ayuntamiento extorsiona a empresarios y ahuyenta la inversión así como las fuentes de empleo, como luego se filtra por desinformación oficial de éstos temas.
Porque está claro que más que en el discurso en los hechos el Gobierno Municipal tiene la responsabilidad de fomentar y ser facilitador de la inversión privada y no el lobo feroz que está esperando a la víctima para devorarla, para asaltarla como ha ocurrido en los últimos tiempos y muchos alcaldes que antes de serlo andaban pidiendo prestado y hoy se sienten jeques árabes, los grandes potentados económicos, antes vestían ropas de la Lagunilla y ahora del «Palacio de Hierro», antes eran trabajadores de ranchos y ahora prósperos ganaderos el poder municipal los perdió.
Esa historia ya no queremos que siga repitiendo, ni mucho menos que el tema de la seguridad y la vida de los tuxpeños en el tema industrial entre a subasta.
El tema Transcanada no debe quedar sólo en una noticia periodística, debe ponernos alertas para cualquier eventualidad, saber para donde correr, lo que jamás debe pasar si se cumple con las medidas preventivas y correctivas necesarias en ésta importante materia.
Que 2020 sea un año de mayor seguridad y certidumbre en Tuxpan.
Editorial
