Koala en estado salvaje
Los koalas dependen de los bosques de eucalipto para sobrevivir, por lo que son especialmente sensibles al más mínimo cambio en los ecosistemas.
Los koalas pasarán a engrosar la lista de animales en peligro de extinción, según una decisión del Gobierno de Australia tras revisar las poblaciones de esta emblemática especie, amenazada en los últimos años por sequías, la tala de árboles y los incendios que asolaron el país en 2021.
«La nueva inclusión en la lista pone de manifiesto los retos a los que se enfrenta la especie», ha declarado la ministra de Medio Ambiente de Australia, Sussan Ley en un comunicado gubernamental en el que se puntualiza, sin embargo, que «juntos podemos garantizar un futuro saludable para el koala, con lo que esta decisión jugará un papel clave en ese proceso».
⚠️ BREAKING: The Australian Government has uplisted koalas on the east coast from Vulnerable to Endangered.
— WWF_Australia (@WWF_Australia) February 10, 2022
This is a bittersweet outcome, but a critical step towards reversing the decline of koala populations. #KoalasForever
(Short thread)👇 pic.twitter.com/Dvy7EN68Xc
Un símbolo nacional en declive
El koala, animal endémico y símbolo nacional de Australia, se enfrenta desde hace tiempo a una profunda crisis. Se calcula que hace más de dos siglos, antes de que los europeos se asentaran en Australia, cerca de unos 10 millones de koalas habitaban en una franja de unos 2.500 kilómetros de largo de la costa oriental. La presión humana fue tal que estos marsupiales, cazados por su preciada piel, estuvieron a punto de extinguirse en la mitad de su área de distribución. Por poner un ejemplo, en el estado de Queensland, situado en el noreste del país, se mataron a un millón de ejemplares, mientras que al final de la última temporada de caza, en 1927, solo quedaban unas decenas de miles.
A lo largo de los siguientes 50 años, las cifras fueron mejorando, en gran parte gracias a las políticas de reintroducción y a los trabajos de las ONG conservacionistas. Pero la pérdida de hábitat y las enfermedades acabaron azotando de nuevo a unas poblaciones en acusado declive.
Es muy difícil censar koalas, por lo que las estimaciones del número de marsupiales varían enormemente en función de la zona o de quien realice el recuento. Hay que recordar que los koalas dependen de los bosques de eucalipto para sobrevivir, por lo que son especialmente sensibles al más mínimo cambio en los ecosistemas.
Según apunta la ONG WWF Australia, las últimas investigaciones han desvelado que las poblaciones de Queeensland se han reducido hasta un 50% desde el año 2001, un descenso que ha sido más acusado en Nueva Gales del Sur, donde se han contabilizado hasta un 62% menos koalas en el mismo período que en los últimos años.
Un 30 % menos en los últimos tres años
Otros estudios, como el publicado por la fundación Australian Koala Foundation el año pasado, en los últimos tres años el país ha perdido cerca del 30% de las poblaciones de koalas. El peor descenso se produjo en Nueva Gales del Sur, donde la cifra se ha reducido en un 41%. En total, la fundación cuantificó que el año pasado es estimaba que había unos 58.000 ejemplares, frente a los más de 80.000 que se contabilizaron en el país en 2018.
Gran parte de la culpa de esta despoblación lo tienen los incendios forestales, que, según una investigación del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), afectaron entre finales de 2019 y principios de 2020 a más de 60.000 koalas.
Hacia una mayor protección
Las autoridades gubernamentales no se han limitado a cambiar el estatus de conservación de la especie, sino que, además, han informado que destinarán una partida presupuestaria de 74 millones de dólares australianos para proteger a esta especie emblemática y salvaguardar sus hábitats: 8,7 millones servirán para financiar proyectos de mejora de salud, investigación genética y apoyo médico, y 12 millones para el Programa Nacional de Seguimiento del Koala, un proyecto gubernamental destinado a la monitorización de estos marsupiales.
Información por NatGeo