El Día Mundial de la Diabetes, instituido por iniciativa de la Federación Internacional de la Diabetes y la OMS, se celebra el 14 de noviembre para conmemorar el aniversario del nacimiento de Frederick Banting, quien, junto con Charles Best, tuvo un papel determinante en el descubrimiento en 1922 de la insulina, hormona que permite tratar a los diabéticos y salvarles la vida.
La diabetes afecta actualmente a más de 285 millones de personas en el mundo y se espera que alcance los 438 millones en 2030.
De conformidad con la información de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006 (ENSANUT), la prevalencia de diabetes aumentó en 14 por ciento, lo que representa un total de 8 millones de personas con diabetes en toda la República Mexicana.
La diabetes mellitus es un factor de riesgo cardiovascular, se estima que entre 7 u 8 de cada 10 personas con diabetes padecen problemas macrovasculares, como cardiopatía isquémica (pérdida de equilibrio entre el aporte de oxígeno al miocardio y la demanda de este tejido), insuficiencia cardiaca (el corazón ya no puede bombear suficiente sangre al resto del cuerpo), la enfermedad vascular cerebral (interrupción del suministro de la sangre que llega al cerebro) y la insuficiencia arterial periférica (bloqueo u obstrucción de las arterias).
· Población total en México 106,7 millones de habitantes.
· Personas con diabetes entre 6.6 y 10 millones (20-79 años), 2009
· Incidencia de diabetes tipo 1 de 0-14 años, 2009 (1.5 por cada 100,000 niños)
· Muertes a causa de diabetes (hombres de 20 a 79 años) 24 mil 994 en el año 2009.
· Fallecimientos femeninosa causa de diabetes (20 a 79 años), 29 mil 898 en el año 2009.
· La población en México de personas con diabetes fluctúa entre los 6.5 y los 10 millones (prevalencia nacional de 10.7 por ciento en personas entre 20 y 69 años).
· En la frontera entre México y Estados Unidos, la prevalencia de diabetes es de 15 por ciento.
· 2 de cada 3 mexicanos tienen sobrepeso u obesidad (prevalencia nacional de obesidad: 24.4 por ciento).
· 90 por ciento de las personas que padecen diabetes presentan el tipo 2 de la enfermedad.
· 13 de cada 100 muertes en México son provocadas por la diabetes.
· El grupo de edad con más muertes por diabetes se ubica entre los 40 y los 55 años.
· En personas de 40-59 años, 1 de cada 4 muertes se debe a complicaciones de la diabetes.
· Actualmente 1 de cada 3 muertes en México reporta diabetes como causa secundaria.
· En promedio los hombres con diabetes mueren a una edad más temprana, 67, contra 70 años en promedio que viven las mujeres.
El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) indica que el gasto anual por diabetes para instituciones de salud equivale a 475 millones de pesos para la Secretaría de Salud.
En el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) durante 2004, la diabetes fue la quinta causa de estancia hospitalaria equivalente a 219 millones de pesos, además invirtió 40 millones de pesos en medicamentos y estudios, 200 millones por hemodiálisis (método para eliminar de la sangre residuos como potasio y urea, así como agua en exceso cuando los riñones son incapaces de realizar su funcionamiento normal), y casi 205 mil días de incapacidad.
En 2004 el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) destinó aproximadamente 15 mil pesos para la atención de cada uno de sus derechohabientes con diabetes.
En el IMSS hay un promedio de 29.5 consultas diarias por consultorio en la Secretaría de Salud son 14.9 en el ISSSTE 16.8, en el programa IMSS–Oportunidades 17.2, en los hospitales de PEMEX 12.4 y en los servicios que otorga la Secretaría de la Defensa Nacional 7.3.
De cada 100 personas con diabetes 14 presentan nefropatía (daño en riñón), 10 desarrollan neuropatía (daño en sistema nervioso), 10 sufren de pie diabético (una de cada 3 termina en amputación) y 5 padecen ceguera.
El paciente con diabetes tiene tres veces más riesgo de cardiopatía o enfermedad cerebrovascular además de presentar trastorno depresivo y cambios de personalidad.
La Diabetes en México
En la actualidad se estima que existen siete millones de mexicanos con el diagnóstico de diabetes que están siendo tratados en alguno de nuestros sistemas de salud, si esto es alarmante, lo es aún más el hecho de que se calcula que el 30% de nuestra población tiene un riesgo alto de ser diabética y el 50% de ellos no lo sabrán ya que la diabetes es una enfermedad que se puede tener y no presentar manifestaciones clínicas hasta unos 10 años después de haberla adquirido, la principal razón de esto es que México ocupa el segundo lugar mundial de obesidad en adultos y el primer lugar mundial de obesidad en niños.
El 90% de los diabéticos tienen diabetes mellitus tipo 2, esto quiere decir que tienen una producción insuficiente de insulina que no alcanza para absorber toda la glucosa que consumen y el 10% de los diabéticos son del tipo 1, en estos pacientes la producción de insulina es nula y tienen que ser tratados con insulina. El problema de salud pública está en la diabetes mellitus tipo 2 que representa el 90% de los casos.
La diabetes mellitus tipo 2 se puede prevenir en muchos casos y en otros muchos diagnosticar en fases tempranas para evitar todas las complicaciones dramáticas que esta provoca: retinopatía diabética y ceguera, insuficiencia renal crónica con sometimiento de los pacientes a diálisis ó hemodiálisis de por vida, hipertensión arterial sistémica, elevación de triglicéridos y colesterol con daño permanente a la circulación de todo el cuerpo, lo que provocará enfermedades cardiacas, lesión de todos los nervios del organismo, lo que junto con los daños a la circulación provocará la amputación de las extremidades inferiores. Por si esto fuera poco, una persona diabética es 30 veces más propensa a adquirir una infección de cualquier tipo que una persona que no tiene diabetes.
Los criterios actuales para el diagnóstico de la diabetes son que cualquier persona con un examen en ayuno de glucosa que sea superior a 100 mg/dL, debe someterse a un examen de tolerancia a la glucosa porque esa persona tiene muchas probabilidades de ser diabético. Hay muchas personas e incluso médicos que mantienen el criterio anterior de que sólo cuando la glucosa es superior a 115 mg/dL ó incluso 120mg/dL, se está en riesgo de ser diabético. En la actualidad una persona que tenga una glucosa en ayuno superior a 125mg/dL es una persona diabética.
Los factores más importantes para padecer diabetes mellitus tipo 2 son en primer lugar la obesidad, en segundo lugar la carga genética: abuelos, madre o padre diabéticos, en tercer lugar la vida sedentaria y el continuo estrés en el que vive la sociedad actual y en cuarto lugar una edad mayor a los 45 años, cuando se juntan dos o más de estos factores el riesgo será mayor.
Es indispensable que cualquier persona obesa, tenga la edad que sea, se realice una prueba de glucosa en ayuno cada 6 meses, mientras no recupere su peso ideal. Las personas que no tengan sobrepeso pero que tengan abuelos, madre o padre diabéticos también se deben someter a una prueba de glucosa en ayuno cada 6 meses desde los 25 años. Las personas que no tengan problemas de sobrepeso y que no tengan carga genética para diabetes deben tomarse una glucosa en ayuno, una vez al año a partir de los 45 años.
El gobierno federal en mi opinión debe prohibir en su totalidad la venta de refrescos, pastelillos y alimentos chatarra en general a los menores de edad, así como los cigarros y las bebidas alcohólicas son nocivos para la salud y se prohíbe su venta a menores de edad, además de tener en sus empaques que son productos nocivos para la salud, está más que demostrado que los refrescos, pastelillos y alimentos chatarra en general son muy nocivos para la salud y no tienen ningún beneficio nutricional, son veneno puro para los niños y adolescentes de nuestra población y representan un problema mucho mayor por la cantidad de personas que los consumen, que el consumo de cigarros, bebidas alcohólicas y drogas. Así como con los cigarros y las bebidas alcohólicas se deben elevar mucho los impuestos en estos productos para que se encarezcan y se disminuya su consumo, además de campañas enérgicas que muestren que el consumo de los mismos es muy nocivo para la salud.
Si no se adoptan medidas contundentes ahora, la diabetes mellitus y sus complicaciones será padecida por un gran número de mexicanos y los gobiernos tendrán que gastar grandes fortunas en el tratamiento de sus complicaciones como ya sucede ahora, sólo que en menor cantidad. La prevención siempre será la mejor estrategia en salud, pero se tienen que tomar medidas en los distintos aspectos del problema para tener una solución integral.
Editorial
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