Se requiere atención integral afirman especialistas
Por Liz Martínez
Tuxpan, Ver.- Aunque autoridades de salud detectaron que la mariguana y los inhalantes son las drogas que están empezado a usar desde los nueve años entre la niñez tuxpeña, los especialistas indican que los pacientes deben ser canalizados al Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA), pero poco o nulo es el avance para contrarrestar el problema al no existir compromiso de por medio de la familia o de los padres directamente.
Psicólogos indicaron que las autolesiones están a la orden del día y por ese motivo mantienen el interés por prevenir ese grave problema desde la primera infancia, porque se brinda talleres de crianza positiva, para que los propios padres se involucren y hagan la parte correspondiente.
Se ha observado que de 15 ó 20 padres citados a los que se les recomienda acudir para implementar estrategias y obtener soluciones, sólo dos llegan a la consulta y partiendo de la premisa de que “el amor todo lo puede”, la ausencia del interés de parte del tutor incrementa la incertidumbre entre los pacientes canalizados.
De acuerdo a la Secretaría de Salud las estimaciones de prevalencias de uso de sustancias adictivas en diversos trabajos varían entre 8.5 por ciento y 27 por ciento; son los inhalables las drogas de preferencia, con índices de consumo de mariguana 2 y 3 veces inferiores.
Los niños entre 5 y 9 años suelen personificar la muerte, hasta los 7 años y medio la consideran como algo alejado, que no afecta a los niños. Entre los 7 años y medio y los 8 y medio empiezan a reconocer la muerte como una posibilidad personal e inmediata.
Mientras que en el tema del suicidio, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, los niños entre 5 y 9 años suelen personificar la muerte, hasta los 7 años y medio la consideran como algo alejado, que no afecta a los niños. Entre los 7 años y medio y los 8 y medio empiezan a reconocer la muerte como una posibilidad personal e inmediata, si bien remota.
El método más utilizado en la tentativa de suicidio es la autointoxicación medicamentosa, siendo notablemente superior la proporción en adolescentes (91 por ciento) que en niños (44.4 por ciento).