Ya no quiere perder a más
Sara Salazar, madre a quien le asesinaron seis de sus diez hijos en Ciudad Juárez, analizará con el resto de sus familiares escapar a alguno de los países que le han ofrecido asilo
Sara Salazar, matriarca de la familia Reyes Salazar, analiza aceptar las invitaciones que varios países le han hecho para irse de México en calidad de refugiados o asilados, ante la matanza de cuatro de sus 10 hijos que declaró tener, así como a uno de sus nietos y una nuera.
En entrevista en el noticiaro de Carmen Aristegui, Sara Salazar reveló que hoy discutirá con sus cuatro hijos que le restan vivos cuál sería el destino para huir de Ciudad Juárez, ya que varios países le han ofrecido asilo, sin que revelara cuales son.
«(Juárez) es una ciudad violenta, aquí ya no hay ley, aquí matan a las personas y las dejan tiradas en la calle, no hay quién investigue», comentó.
Rechazó hablar de la situación de su hijo Miguel Ángel Reyes Salazar, de 26 años, acusado en comunicado de la Secretaría de la Defensa Nacional de formar parte de un grupo de sicarios conocidos como «Los Escajeda».
Sara Salazar dijo que ninguna autoridad de Chihuahua se ha acercado a su familia para ofrecer aclarar los asesinatos de sus familiares.
Según el visitador Gustavo de la Rosa Hickerson, visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Chihuahua, durante el sepelio de sus hijos realizado este fin de semana, hubo 500 soldados custodiando a la familia Reyes Salazar, pero nadie ayudó a cavar la tumba para sus hijos.
El viernes pasado fueron encontrados lo cuerpos de Elías y Malena Reyes Salazar y Luisa Ornelas Soto, familiares de la activista Josefina Reyes Salazar, asesinada en enero del 2010.
Las víctimas son hermanos de Josefina Reyes Salazar, activista luchadora por los derechos humanos, quien recibiera amenazas por investigar y oponerse a los abusos de militares y federales en el Valle y, a pesar de que organismos de Derechos Humanos nacionales e internacionales alertaron del peligro que amenazaba a la familia, fue asesinada en enero de 2010; en agosto del mismo año también fue muerto su hermano Rubén Reyes Salazar.
El universal
Editorial
