Nueva ley no respeta autonomía municipal y cae en procedimientos centralistas y paternalistas, no acordes con la grandeza a que aspira Veracruz
Por: Braulio Javier García Nieva/Política Urbanista
La aplicación de la planeación en los 32 estados de la República mexicana se genera y a generado de manera dispar, lo que crea todo un reto en este nuevo marco republicano centralista que nos envuelve. Si no se cree eso, bastara por dar un recorrido a nuestro hermoso país y ver las profundas diferencias que tenemos en nuestro acrecimiento y planeación de las ciudades en las entidades estatales de México.
Pareciera que en algunos estados ya se ha avanzado de manera significativa es este rubro, mas sin embargo, en otros no, lo que generó que el gobierno federal retomara el tema que dejo abandonado 20 años atrás y lo renovara.
Lo anterior es referente a lo ocurrido en el marco internacional del encuentro entre naciones de la ONU en la ciudad de Quito, Ecuador, mismo evento que al desarrollarse cada 20 años México llega con el compromiso explícito de renovarse en materia de planeación y asentamientos humanos, compromiso que cumple con creces al llegar con la nueva y recién votada por la cámara alta ley 241.
Tras esa iniciativa y todos encaminados con los objetivos de la agenda 2030 de ONU-HABITAT, muchos estados se vieron congratulados al tener una ley que reflejaba el propio avance estatal ahora en una ley federal.
Estados como Veracruz plantearon su ley incluyendo figuras como los Implanes, indicadores de seguimiento y otros conceptos, daban la sensación de estar alineados con el conglomerado nacional e internacional que son los objetivos de la agenda 2030.
Sorprendentemente en el ultimo minuto el estado de Veracruz presenta una reforma a esta ley y lo que resulta mas que ley de planeación debiera tomarse como un marco regulatorio de lo que debiera ser un esquema de procedimientos internos de gobernanza local; pues carece de esa trascendencia y respeto de la autonomía municipal de los gobiernos locales al caer en esquemas paternalistas y centralistas.
La ley estatal no toma en cuenta la planeación estatal en base a la suma de desiciones de sus gobiernos locales y se esta viendo coartada y fracturada por no existir un cuerpo técnico con expertos que arrope las desiciones del estado que infieren directamente en el quehacer municipal
Y esto es así:
Se proponía que el municipio dueño de su propia realidad tomara en cuenta a su ciudadanía a través de su academia, sus cámaras y sus colegios de profesionistas; para crear un respaldo de sus políticas y mas aún, para asegurar una trascendencia mayor a sus decisiones que traspasen su propio periodo de gobierno y logren seguir ese trabajo aún con nuevos gobernantes de por medio, al ser, a parte de vigilantes, una especie de banco de datos y proyectos que mantendría como principio: el crecimiento y desarrollo de su municipio como principal objetivo.
Si este esquema lo imaginamos al ámbito estatal, luego entonces, ¿donde esta ese comité con suficiente conocimiento y experiencia en la materia para sustentar respaldar y dar continuidad y seguimiento a las desiciones estatales que aseguren su trascendencia mas allá de los 6 años? y así se mantenga el rumbo estatal, creando un estado con visión a futuro. Por lo menos en el periodo de tiempo que como regla no escrita en el marco internacional se ha propuesto que es al año 2030.
No es tan difícil marcar las bases de esta planeación, mas sin embargo haber realizado un borrón y cuenta nueva en esta ley, únicamente para cometer los errores propios, no es buen augurio en una ley que debiera asegurar la planeación así como su propio nombre lo dice “planeación”.
Esta es una ley muy necesaria y como fundamento de inicio es buena, trabajemos en ella para ampliarla y mejorarla y poder lograr así, un documento mas acorde a la grandeza del estado de Veracruz.
Editorial
