Por Alberto Nájar/BBC Mundo
En un nuevo golpe a la versión gubernamental sobre la suerte de los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa secuestrados en en septiembre de 2014, un grupo de forenses argentinos que ha estado involucrado en el caso desde el principio dijo que no existen evidencias científicas que muestren que los jóvenes fueran incinerados en un basurero.
El informe fue realizado por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), y se entregó este martes a la Procuraduría (fiscalía) General de la República (PGR).
Es la misma conclusión planteada desde septiembre de 2015 por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, enviados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En el documento, el equipo de peritos argentinos –integrado por forenses, antropólogos biólogos y expertos en fuego, entre otros- advierte contradicciones en la investigación oficial, que el gobierno asegura es «la verdad histórica» de lo ocurrido.
Uno de los elementos centrales es que en el basurero de Cocula, Guerrero, no ocurrió un incendio de la magnitud suficiente para incinerar los cuerpos de los estudiantes, como señaló la PGR.
Ahora el EAAF recomienda cerrar las investigaciones en el basurero, donde no se encontraron evidencias de que los estudiantes fueron incinerados allí.
«Es tiempo de seguir la búsqueda de los estudiantes en otros lados», indica Mercedes Doretti, directora del EAAF.
Los forenses argentinos fueron invitados a participar en la investigación por pedido expreso de los familiares de los estudiantes.
Balas y contradicciones
La hipótesis de la PGR se basó en el testimonio de varios detenidos a quienes acusa de asesinar y cremar a los jóvenes de Ayotzinapa.
Pero la evidencia analizada por los forenses argentinos y los expertos de la CIDH muestra otra realidad.
Imágenes de satélite, por ejemplo, muestran que desde 2012 se realizaron varios incendios en ese sitio, pero no uno de la magnitud necesaria para incinerar 43 cuerpos.
En el basurero también se encontraron restos humanos que corresponden a por lo menos 19 personas distintas, pero según el informe del EAAF, no se trata de ninguno de los estudiantes.
«No hay ninguna identificación positiva de los 43 en el basurero», señala Modotti.
Los forenses también encontraron cartuchos y balas que corresponden a 39 armas distintas, entre ellas fusiles de asalto.
Los inculpados por la PGR declararon que sus jefes les ordenaron llevar armas cortas al basurero.
El EAAF espera que su informe final se integre a la investigación que realiza la fiscalía mexicana.
Hasta ahora la PGR no ha emitido comentarios sobre el tema.