Patriarca de una dinastía de distinguido tuxpeños, los Basáñez Ebergenyi
Por Ramón Rodríguez Rangel
La familia Basáñez Ebergenyi está de fiesta, ha cumplido un aniversario más, la patriarca de la familia, la señora María Magdalena Ebergenyi Belgodere, a quien con cariño denominamos Doña Maruca, quien cumplió sus 88 años, festejada por sus hijos, nietos y bisnietos, además de otros familiares cercanos, que desde distintas partes del país y del extranjero acudieron a compartir el pastel con la distinguida cumpleañera.
Doña Maruca llegó a su aniversario en completa lucidez, salud, con una gran inteligencia y memoria, mujer de valores y con la gran calidad humana que la ha caracterizado siempre.
Forjadora junto con Don Miguel Basáñez Sorcini, su esposo ya fallecido, de una dinastía de gente valiosa para Tuxpan y para México, algunos de prestigio internacional, como su hijo el Doctor Miguel Basáñez Ebergenyi, ex embajador de México en Estados Unidos, y uno de los intelectuales de vanguardia, no solo en nuestro país sino en el mundo.
Maruca Ebergenyi tiene estudios de psicología, inglés, francés, piano, fotografía, ética, floricultura, etiqueta y cocina, persona virtuosa a la que Tuxpan le debe un reconocimiento por su labor social, porque fue fundadora del Instituto Mexicano de Protección a la Infancia (IMPI) ahora DIF, en la zona Norte de Veracruz, en los tiempos de Eva Sámano de López Mateos, cuando ella se levantaba desde las 4 de la mañana, para que a las 8 de la mañana, más de dos mil niños tuxpeños tuvieran su desayuno escolar a tiempo.
La distinguida dama tuxpeña es poseedora de una memoria enciclopédica, así como de una gran sabiduría, tiene un sin fin de anécdotas de la historia regional y de su convivencia con grandes personalidades del país, como presidentes de la república y sus esposas, además de múltiples viajes recorriendo el mundo para promover el puerto de Tuxpan y en donde además pudo capturar artísticamente una gran variedad de fotografías.
La familia Basáñez Ebergenyi es un referente de desarrollo en Tuxpan, y no es para menos, promueven desde tiempo atrás el proyecto más importante de desarrollo económico, no solo de Tuxpan, sino del estado de Veracruz, la construcción del Puerto Profundo de Tuxpan, que va avanzando y que cuando se realice cambiará la vida de los tuxpeños para bien.
Doña Maruca Ebergenyi de Basáñez durante su festejo familiar comentó “Fui e hice, lo mejor que pude y lo siento sino fui como cada uno hubiera querido que fuera, pero, un ser humano es producto de la infancia, adolescencia, ambiente, padres, situación económica, familiar y social, estudios, oportunidades, fortaleza física y emocional, traumas, salud, paz espiritual y cientos de ladrillos que se van cimentando, como escalones de uno por uno, hasta llegar al final de nuestras vidas con éxito o fracaso.”
Recomendando también “Mide la riqueza que tienes, por la paz espiritual, salud y bienestar”.
¡Muchas Felicidades Señora Maruca! Y que el festejo se prolongue muchos años más.
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