La Vanguardia
Hoy, 29 de septiembre, es el Día Mundial del Corazón. Una efeméride impulsada en el año 2000 por la Federación Mundial del Corazón en colaboración con la Organización Mundial de Salud (OMS) y la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO) que desde entonces se celebra en el último domingo de septiembre para concienciar a la población acerca de la importancia de las enfermedades cardiovasculares.
Y es que cada año 17,9 millones de personas mueren a causa de una enfermedad cardiovascular (ECV). De hecho, hoy en día, la ECV es la primera causa de muerte en todo el mundo y se estima que la cifra ascenderá a 23 millones en el año 2030.
Ante semejantes datos, la Fundación Española del Corazón no se cansa de repetir lo importante que es seguir una alimentación saludable y una dieta correcta –junto con el ejercicio– para mantener este músculo vital sano.
Además, en su página web detalla las dietas que –siempre bajo prescripción médica– pueden ayudarnos a combatir el sobrepeso, a bajar el colesterol o la tensión alta y nos recomienda los 10 alimentos que deberíamos tomar con frecuencia para prevenir las enfermedades cardiovasculares. Son los siguientes:
Nueces
Es un alimento ‘estelar’ para prevenir y cuidar problemas cardiovasculares gracias a sus altos niveles de ácidos grasos Omega-3, que protegen el corazón.
Brócoli
Ácido fólico, zinc, hierro, calcio, vitamina K, antioxidantes… Un alimento que ayuda a reducir el riesgo de accidentes vasculares.
Chocolate negro
Ayuda a restaurar la flexibilidad de las arterias y evita que los leucocitos se peguen a las paredes de los vasos sanguíneos.
Fresas
Contienen flavonoides, que contribuyen a dilatar las arterias, protegen el endotelio (la capa interior de los vasos sanguíneos) y controlan la tensión arterial.
Curry
La curcumina, un potente antioxidante presente en este condimento, reduce las probabilidades de sufrir insuficiencia cardíaca e hipertensión por sus propiedades antiinflamatorias.
Té verde
Una o dos tazas al día contribuyen a prevenir enfermedades cardiovasculares, ya que ayudan a disminuir los niveles altos de grasa en la sangre.
Aceite de oliva
La Fundación Española del Corazón reconoce que la ingesta diaria de aceite de oliva ayuda a proteger la salud cardiovascular gracias a su composición en ácidos grasos y por sus antioxidantes.
Salmón
Ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos e incrementa la fluidez de la sangre, al mejorarse la elasticidad de las paredes arteriales.
Vino tinto
El etanol y los polifenoles tienen efectos beneficiosos sobre las moléculas inflamatorias causantes de la ateroesclerosis.
Legumbres
Diferentes estudios avalan que sus proteínas de excelente calidad y su poca grasa favorecen unos saludables niveles de colesterol en sangre.